Independizarse es un objetivo que todos nos marcamos en algún momento de nuestra vida, por lo que es considerado un paso natural. La primera vez que nos vamos de casa, debatimos entre varias opciones: irnos solos, o bien con un acompañante. ¿Qué es mejor? ¿Vivir solo o compartir piso?. Te contamos las principales ventajas y desventajas de tomar cualquiera de las dos decisiones.
¿Vivir solo o compartir piso?
Es una decisión difícil de tomar, pero mientras tengamos claro lo que vamos a valorar, estas ventajas y desventajas deberían ayudarte a tomar la decisión final.
Compartir gastos. una de las mayores ventajas de vivir con alguien, por no decir la principal, es el hecho de compartir gastos. Viviendo junto a una persona nos ahorraremos mucho dinero en gastos de la compra, y del día a día.
Ahorra tiempo. Compartir piso te ayuda a ahorrar tiempo en las tareas del hogar. Si os sabéis organizar bien, tendréis las labores de casa al día y con la menor dosis de tiempo invertido posible
Aprender a convivir y conocer a gente nueva. Muchos os lanzáis a compartir piso por primera vez con gente que originalmente no conocéis, esto es una experiencia habitual entre estudiantes y gente joven.
Evitar la soledad. Socializar es una ventaja para aquellas personas que no les gusta sentirse sola en el día a día. Compartiendo piso, evitas esta tendencia.
Vivir solo o compartir piso es una tendencia entre jóvenes más frecuente de la que nos paramos a pensar. Si eres una persona que no es capaz de estar sola, quizás la mejor opción para ti sea buscar un acompañante, o varios.
En cambio, si aprecias la tranquilidad de no compartir espacio, no estar pendiente de nadie, y de tener tu propia privacidad sin que nadie te invada, vivir solo u sola es la mejor opción si buscas mantener esa sensación.
Tened en cuenta que nunca es tarde para vivir acompañado, ya que el irnos solos a un piso no significa que el día de mañana no podáis incluir a alguien en la estancia.
Te dejamos varios tips que pueden ayudarte a elegir:
- Si vas a vivir solo, pero planteas que alguien pueda incorporarse al domicilio pronto, elige un piso con el espacio suficiente, aunque al principio debas acarrear con más gastos de la cuenta.
- Vivir acompañado te permite elegir un piso con mejores calidades de vida. Más cercano a la zona que te guste, con espacios más amplios, y con otras prestaciones que se abren gracias a la posibilidad de pagar menos.
- Vivir solo, en contraparte, te exige elegir un piso más adecuado a tus necesidades básicas, prescindiendo del confort o calidad de vida al que te puedes habituar.